Unimos estos 3 ingredientes botánicos por sus múltiples beneficios, para usar directo en la piel (no requiere diluirse).
El árbol de té, es antimicrobiano, fungicida y antinflamatorio. Ayuda a mejorar afecciones de la piel como el acné, eczema, psoriasis (incluso de placa), dermatitis o la rosácea. Al ser bactericida, evita que la infección crezca y elimina a la àcaro demodex (presente en casos de rosácea). Tiene múltiples usos: tratar y prevenir hongos, repelente de mosquitos y para aliviar sus picaduras, aplicarlo en el jabón liquido o shampoo, como desodorante natural, despeja vías respiratorias.
Los aceites de cáñamo y jojoba, son aceites no grasos, ideales para pieles sensibles. Tienen propiedad antiinflamatoria, regeneradora y protectora, útil en afecciones de la piel como psoriasis, eczema, dermatitis, acné y rosácea. Regulan la producción de sebo, ayudando a reducir el exceso de grasa, si tienes piel grasa-mixta o a mantenerla hidratada si tienes piel seca
Ingredientes: aceite de jojoba primera presión en frío, aceite de semillas de cáñamo primera presión en frío y Aceite Esencial de Árbol de té (tea tree, maleleuca alternifolia)
Precauciones: Al ser un producto natural, no necesariamente funciona en todas las personas. Haz un test de alergia, coloca unas gotas detrás de la oreja o en el antebrazo, si no hay reacción al día siguiente, puedes usarlo. No ingerir. No debe usarse en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia (ej: pezones), ni en niños menores de 2 años.
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